Candelaria Mansilla - Villa O´Higgings

A la mañana siguiente los carabineros de Chile nos vinieron a regañar. Nos habíamos metido en su vieja cabaña abandonada. Les comentamos que se estaba haciendo de noche, llovía, hacia frío, la puerta estaba abierta...¡además no existía ningún cartel de prohibido! Incluso limpiamos y adecentamos el lugar, en realidad nos merecíamos que nos dieran unos cuantos pesos por la labor social realizada ;)
Recogimos nuestras cosas, nos disculpamos, todo arreglado, no hubo ningún problema. La bronca la llevamos, pero la noche anterior no nos la quitaba nadie ;)


A las 11 llego el Ferry hacia. Tenia dos tarifas:
La básica que consistía en llevarte a Villa O´Higgins. La completa, más cara, pero también más bonita. Hacía un recorrido por el lago hasta llegar el glaciar O´Higgins. Nos encontrábamos en la zona sur del parque nacional de los glaciares, aquí hay hielo por todas partes, en cada valle hay un glaciar. Una vez que esta aquí que menos que ver un glaciar!
Siempre podemos consiguen más cosas en grupo que por cuenta propia, aunque la mayoría de veces nuestro egoísmo hace que solo pensemos en nosotros mismos.
Así que entre Paco, Laura, Nacho, la pareja de franceses y un servidor, decidimos negociar el precio con Hans de Silva, el capitán del barco. Si no nos bajaba el precio por ver los glaciares, ninguno iría a verlos.


Hablamos con Hans y acepto de inmediato. Hans es un tío majo, geógrafo de Santiago de Chile, se vino a vivir a O´Higgins.A medida que el barco se acercaba al glaciar, el frío y el aire aumentaba. Era la segunda vez que veía icebergs, ahora mucho mas cerca, el azul que tienen es flipante. ¡Parecen que están teñidos!.
El ferry iba sorteando icebergs hasta llegar a la pared del glaciar donde se detuvo unos minutos. Se podía observar como caían masas de hielo de sus paredes.




A la vuelta, la tripulación nos invito a whisky, solo encestábamos hielo para que no estuviese caliente.
Evidentemente con tanto iceberg cerca el hielo no era un problema. El ferry tenia una lancha zodiac, así que solo hacía falta un voluntario. No hizo falta ni que lo pidiese, Nacho ya estaba sentado en la lancha...







Minutos después nos tomamos un Jhony Walker con hielo centenario del glaciar O´Higgins, algo irrepetible!

El barco llego a Villa O´Higgins a las 17:30. Una vez allí nos fuimos al hostel de Jorge, el Mosco. Jorge era gallego, había recorrido sudamérica durante 3 años, hasta que un día llego a Villa O´Higgins y decidió quedarse allí. Vendió su negocio y monto un hostel aquí.


Al día siguiente nos esperaba la mítica carretera austral. Estaba impaciente!